Sedentarismo: por qué pasar recostado en el sillón es tan malo como fumar 

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Según la OMS, el sedentarismo es uno de los factores que provocan una gran cantidad de muertes. Tanto así que "se podrían evitar hasta cinco millones de muertes al año si la población mundial fuera más activa". Una cifra algo menos que los 7 millones de fallecidos al año por fumar. 

En medio de la pandemia por el coronavirus, en donde los espacios reducidos de confinamiento de la mayoría de los hogares no son muy adecuados para una rutina de ejercicios, este problema se acentúa más.  

Sumado a eso, el estrés laboral, académico, y de la vida diaria hace que lo único que queramos al final del día es relajarnos y pasar recostados en el sillón viendo una buena serie o película.  

Sin embargo, sea justo o no, lamentablemente el hecho es que esto no es bueno para nuestra salud. Incluso, varios especialistas y estudios indican que el sedentarismo es tan malo como fumar. 

Estudios: el estilo sedentario es tan malo como fumar 

En 2012, la profesora de la Universidad de Harvard I-Min Lee lideró un estudio sobre los efectos del sedentarismo publicado en The Lancet. “Si eres físicamente inactivo tu riesgo de mortalidad prematura es probablemente comparable con la de fumar", afirma a BBC Mundo. 

"Sabemos que estar inactivo aumenta tus riesgos de desarrollar muchas enfermedades crónicas como las coronarias (en vasos sanguíneos del corazón), ataques cerebrales, diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer", explica. 

Mujer recostada en el sillón
Mujer recostada en el sillón

Otra investigación estadounidense de 2018 publicada en Cleveland Clinic señaló que el sedentarismo afecta nuestra expectativa de vida tanto como fumar.  

Este estudio analizó la estadística de mortalidad de 122.007 pacientes entre 1991 y 2014 y analizó su estado físico en pruebas de esfuerzo. Arrojó que quienes tenían un mejor estado físico llevaron una vida más larga y saludable; mientras quienes tenían un bajo rendimiento tenían las tasas más altas de mortalidad. 

Asimismo, investigadores en Suecia, publicaron los resultados de su estudio sobre la relación entre mortalidad y sedentarismo, en 2016 en la revista European Journal of Preventive Cardiology ("Revista europea de cardiología preventiva"). 

"La baja capacidad física representa un mayor riesgo de muerte que la presión arterial alta o el colesterol alto", señaló el autor principal del estudio, Per Ladenvall. 

¿Qué hacer? 

Para revertir los efectos negativos del sedentarismo, los expertos recomiendan estar en movimiento al menos dos horas y media (150 minutos) por semana. No es necesario ir al gimnasio o hacer un deporte tan exigente, sino realizar actividad física. 

Puede ser caminar a paso rápido durante 15 a 30 minutos al día, subir y bajar la escalera o realizar una actividad que requiera esfuerzo físico y movimiento, como jardinería, caminar a la casa o andar en bicicleta.  

Hay algunos deportes que puedes realizar en casa, en espacios reducidos, como el yoga, abdominales, o el baile.  

En cuanto a los niños y adolescentes, se recomienda que estén activos al menos una hora cada día, aunque no tiene que ser una hora de corrido.